Los discapacitados, ¡también existen!

Junto a la publicación aparecida el 06-Ener0-2011 en este blog, es la segunda que dedico a este tema, que algunos dirán que no es de los temas "imán" para atraer visitantes a un blog, o no faltará quien diga: no soy el más idóneo para tratar esos temas, porque ni soy profesional de esa área ni trabajo en esa área. De hecho, he escuchado muchísima gente que no les gustan los reportajes especiales dedicados a personas especiales o discapacitados, en la idea de que plantean una realidad tan cruda, que a la vez es deprimente. Sin discutir la validez de esas razones, puedo decir que mi motivación para escribir, primero es para enunciar algo muy sencillo: es una R-E-A-L-I-D-A-D social muy dramática, por tanto, hablamos de gente "de carne y hueso" que sufre y merece nuestra atención, y negándonos a saber de ellos, es como negarles el derecho a existir, porque los abandonamos a su suerte no muy privilegiada. Hablar del Amor de Dios, es hablar de un amor que no es excluyente, ni indiferente, ni indolente: ese es el Amor de Dios, que quizás no se manifieste así en nosotros es algo distinto, cuando volteamos la mirada hacia el sufrimiento de personas discapacitadas o especiales. No digo que al terminar de leer ésto, vas a salir a buscar una Institución a ofrecer tus servicios (que sería genial, pero sé que no va a ocurrir), pero si te planteo la inquietud para sensibilizarte; por ejemplo, veo cruel aquellas personas que critican las legislaciones laborales que quieren obligar a los patronos a contratar una parte de su nómina con personas discapacitadas, y lo veo hasta injustificable, porque si les negamos la dignidad del trabajo, o los condenamos a la muerte por hambre, o los arrastramos al delito. Como ven, sí hay falta de sensibilidad, porque en lugar de criticar, nuestra actitud debe ser apoyar esas legislaciones y esos patronos que actúan en beneficio de personas tan necesitadas de ayuda especial. Incluso, quiero plantear que hay gente que se burla de los sordos, de los ciegos, de los minusválidos, porque hacen su mecánica de caminar o de hablar con una dificultad que es tomada para burla, lo cual es 100% reprobable. Es posible que quizás pienses que no hace ningún efecto, pero en el matutino de hoy te invito a orar por los discapacitados, pidiendo que Dios toque el corazón de los gobernantes y de personas poderosas, que puedan aportar la ayuda que sea, que igualmente será muy útil; lastimosamente, en el caso de políticos, la ayuda muchas veces no es del todo sincera porque lleva de trasfondo objetivos proselitistas que redunden en invalorables efectos mediáticos. Pero bueno, es importante que recuerdes: "los discapacitados, ¡también existen!", por lo menos, ora por ellos, y te aseguro que ellos no desean nuestra compasión sino nuestro apoyo, y no importa si esos apoyos no ocupan titulares de diarios, porque lo importante es el agradecimiento de sus corazones. Para finalizar:

una palabra de felicitación a quienes realizan trabajo con estas

personas, respondiendo al llamado a obrar en esas áreas desde Instituciones religiosas (católicas o protestantes) o de caridad. Como ellos también tienen derecho a sonreír, y sus sonrisas son tan esperanzadoras, acá les dejo estas 2 imágenes, pero además de ellos mismos, también depende de nosotros en una muy alta proporción que puedan seguir regalándonos tan ejemplares sonrisas que vencieron con éxito las dificultades y la autocompasión, para que puedan acompañarnos en el coro: Sonríe, Dios te ama.