¿A quién no le agrada recibir buenas noticias?. Las buenas noticias cambian el ánimo de una persona, y la rebosan de optimismo entusiasta. Incluso hay ocasiones que una buena noticia, puede ser la esperanza que albergamos de que todo salga bien o mejore, como el caso de noticias de recuperación física de enfermos o el otorgamiento de créditos financieros. Pero sucede que Dios no desea ni te reserva para tí, nada semejante a malas noticias. Él incluso aspira a que estés convencido del pleno bien permanente que tiene reservado para tí. De manera, que el cristiano debe saber e interiorizar la verdad de que Dios nos sorprenderá gratamente cada nuevo día, con pensamientos o hechos que redundaran en nuestro bien, que pudiera ser mayor salud, mejoría de finanzas, encuentro de un mejor empleo, encuentro de la pareja ideal, etc. Si has orado por una casa, ¿dudas que Dios te la puede proveer?, lo mismo por un empleo, o por la salud. Cultiva la actitud mental y espiritual de esperar cada día sólo lo mejor de Dios, y dar gracias por anticipado por ese bien que sabemos que pronto nos llegará.
Buscar a Dios al alba, es la mejor forma de empezar el día. Una breve "reflexión espiritual" te ayuda en ese objetivo, y es lo que te ofrece este blog, plasmando la cotidianidad en términos espirituales. Acompaña la lectura con una oración de fe, y ... verás excelentes resultados. Si deseas envía estas reflexiones como mensajes de texto a celulares de amigos. ¡Construímos una mejor sociedad, impactándola con el mensaje de Jesús!. Autor: ANGEL PAZ (Oct.8-2010)
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