Todos los seres humanos tendemos a contar con un punto de apoyo. Cuando niños, nuestro punto de apoyo estuvo en el cuidado y mantenimiento que recibimos de nuestros padres. En la crucial etapa de escolaridad, también contamos con un apoyo muy valioso, que fueron las desinteresadas y utilísimas enseñanzas de nuestros maestros. En la edad adulta encontramos apoyo a muchas circunstancias difíciles en amigos y parientes; pero, en todas las etapas cronológicas de tu vida, y en toda circunstancia, siempre hemos contado con Dios. Y, Dios nos da algo muy valioso como es fortaleza en los momentos de angustia, que pueden ser momentos marcados por depresiones, soledad, crisis, en fin, tantas circunstancias de tan fuerte impacto emocional, que sólo Dios puede solventar con eficiencia. Porque en esos momentos, la fortaleza espiritual que recibimos de Dios, impide el derrumbamiento emocional y una posible caída física a posteriori por los niveles desbordados de stress. Es importante aprender a valorar la fortaleza de Dios en nosotros, porque en resumidas cuentas, se trata del Espíritu de Dios en nosotros obrando para nuestro bien.
Buscar a Dios al alba, es la mejor forma de empezar el día. Una breve "reflexión espiritual" te ayuda en ese objetivo, y es lo que te ofrece este blog, plasmando la cotidianidad en términos espirituales. Acompaña la lectura con una oración de fe, y ... verás excelentes resultados. Si deseas envía estas reflexiones como mensajes de texto a celulares de amigos. ¡Construímos una mejor sociedad, impactándola con el mensaje de Jesús!. Autor: ANGEL PAZ (Oct.8-2010)
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